Conocemos la Asus Strix R9 390X al detalle
La renovación de la AMD R9 290X ya está aquí y viene cargada de sorpresas, como unos increíbles 8 GB de memoria para ejecutar los juegos con todo detalle, texturas ultra y altas resoluciones. La Strix R9 390X llega con novedades que harán que dejes tu anterior gráfica de lado para adquirir esta maravilla.
El núcleo de esta bestia es un chip Grenada con 2816 Stream Processors, 176 Texture Units y 64 ROPs, una potencia que, junto con los 8 GB GDDR5 con los que viene esta Strix, podremos ejecutar juegos a resoluciones 4K para tener el máximo nivel de detalles! El núcleo viene de serie a 1050 MHz pero no será difícil subir esa cifra hasta los 1090 MHz para sacar más jugo de la Strix R9 390X. Su bus de 512-Bit se asegura de tener un buen ancho de banda para jugar a mayores resoluciones.
Como no podía ser de otra forma, esta gráfica cuenta con las mejoras que se incluyen en otras tarjetas Asus, como lo es su sistema de alimentación DIGI+ VRM de 8 fases pero esta vez con componentes mejorados, los nuevos Super Alloy Power II que logran el grado aeroespacial. El uso de todos estos componentes mejora la calidad de la energía que pasa por la gráfica y otorga un mayor tiempo de vida, al mismo tiempo que reduce la temperatura al mejorar la eficiencia en un 15%. Con esto, y al mismo tiempo que aumenta su vida, aumenta también la capacidad de overclock hasta en un 30%. La Asus Strix R9 390X es una tarjeta gráfica excepcional, con grandes mejoras y muchas posibilidades para mejorar su funcionamiento, como el uso del software GPU Tweak para aumentar sus frecuencias de trabajo.
El uso del ya conocido DirectCU III hace que sea completamente silenciosa ya que apaga sus ventiladores cuando no se necesiten, incluso jugando a muchos títulos podremos disfrutar de esta tecnología 0dB. La estructura del nuevo disipador está perfectamente pensada para cubrir todos los componentes necesarios a lo largo del PCB, los cuales han sido construidos de manera 100% automática con un nuevo proceso de automatizado por el cual Asus consigue reducir la tasa de fallos y, por ende, el coste de fabricación y calidad del producto.
Como conectores para salida de vídeo tenemos un DVI-D, un HDMI y tres DisplayPort 1.2. Con la Strix R9 390X no querremos tener otra tarjeta gráfica, la potencia está aquí, compruébalo!
