EL NACIMIENTO DE LA PRIMERA TARJETA MADRE PARA JUEGOS
En 2006, el mercado de juegos para PC estaba evolucionando rápidamente. Una variedad de emocionantes juegos en 3D invadió la escena, atrayendo a masas de nuevos reclutas a los juegos de PC y llevando al límite el hardware existente.
Junto con la GPU, cada componente del sistema afectó la experiencia de juego: rendimiento de la CPU, velocidades de reloj de RAM e incluso ancho de banda del subsistema. Para sortear los cuellos de botella, los usuarios comenzaron a incursionar en el overclocking, pero las tarjetas madre de la época eran muy escasas en este campo.
Para solucionar los problemas, el director de la división de I+D de tarjetas madre de ASUS, Jonson Lee, y su equipo buscaron crear un tarjeta madre dedicada para juegos, minuciosamente diseñada para abordar todos los problemas de overclocking de la CPU y el chipset. En el nivel de la placa de circuito (PCB), el equipo utilizó componentes de potencia robustos y vías de señal optimizadas para eliminar los cuellos de botella eléctricos de la ecuación. Para mantener la temperatura bajo estricto control, todas las áreas críticas de la tarjeta madre se enfriaron mediante un disipador térmico de cobre de tres secciones conectado por un tubo de calor enrollado. Luego, con la base de hardware en su lugar, Jonson y su equipo invitaron a destacados entusiastas de la tecnología, overclockers extremos y jugadores al proceso de desarrollo para crear un BIOS de tarjeta madre cargado con opciones de ajuste estructuradas que fueran más fáciles de usar para todos, tanto principiantes como expertos.
Al acercarse la presentación oficial, Jonson Lee se dio cuenta: “El propósito de esta tarjeta madre es ayudar a los jugadores, para asegurarse de que acierten en lo que tienen en la mira. Es por eso que esta tarjeta madre se conocerá como Crosshair, y tal vez se convierta en la herramienta ideal para los jugadores que buscan llevar su juego al siguiente nivel”. Después de su lanzamiento, Crosshair recibió excelentes críticas de los jugadores gracias a su excelente rendimiento y opciones flexibles. La fórmula de colaboración utilizada para encabezar Crosshair se convirtió en la base de todo el desarrollo futuro de ROG, generando una amplia gama de tarjetas madre, la creación de utilidades de software infundidas con inteligencia artificial y nuestra eventual expansión a nuevas categorías de productos.